jueves, 12 de julio de 2012

Ensayo. Por Alejandro Diaz Collovini.


La ciudad, lugar muy complejo donde sus residentes pueden o no llegar a sentirse identificados. Las personas pueden pasar toda su vida en una ciudad y solo transitar lugares que no la definen (fiestas privadas, centros comerciales, tiendas, entre otros), aunque también hay otras que les agrada pasear por los lugares que hacen que se sientan que de verdad están viviendo en la ciudad (bulevares, plazas, monumentos naturales, lugares emblemáticos, entre otros). Al asociar esto con la ciudad de Caracas se puede observar que una gran cantidad de personas solo salen de sus hogares para ir a un lugar que no genera una verdadera identidad. Mientras que existen otras que prefieren salir a un parque, como el  Parque del Este o del Oeste, visitar monumentos, como el obelisco de Altamira o visitar lugares característicos, tales como el Ávila, el Cementerio o el Paseo los Próceres, todos estos lugares que de verdad representa a la ciudad, la hacen única y logran que nos sintamos parte de ella.

Entre estos lugares, uno muy peculiar es el Paseo los Próceres, ya que se encuentra cerca de un pequeño centro comercial. Por ende se puede observar un contraste entre un lugar donde uno se puede sentir identificado con la ciudad y otro donde lo que se puede sentir es que nos encontramos en un lugar repetido, ya que básicamente todos los centros comerciales, ya sean grandes o pequeños, terminan siendo lo mismo.


Al hablar del Paseo los Próceres, que se encuentra en el Fuerte Tiuna, se habla no solo de un lugar donde se encuentran las estatuas de los próceres de la independencia, esculturas, fuentes, entre otros. Se está hablando de un lugar que nos logra hacer sentir parte no solo de la ciudad sino también de la nación, ya que viene siendo un lugar en memoria de los próceres que lucharon por la independencia del país. Al pasear por el lugar y observar las hermosas estatuas, las bellas fuentes, el espectacular espejo acuático y los monumentos hacia los próceres, se obtiene un sentimiento de identidad y de gusto, donde se puede observar y pasear de manera calmada y sin ninguna presión. Ahora, cuando recorremos el lugar y dejamos a un lado los maravillosos monumentos, podemos observar que también representa un espacio de esparcimiento para algunas personas, quienes van a manejar bicicletas, patines y patinetas, a trotar, realizar ejercicio, llevar a sus hijos a un pequeño parque que se encuentra en el lugar, a pasear a sus mascotas o simplemente a sentarse, relajarse, observar y disfrutar del lugar. Por ende, nos podemos dar cuenta que son muchas las personas que también logran sentirse identificados con el lugar que se nota que la transcurren frecuentemente y parecen sentirse parte de ella.
Por otro lado, muy cercano al Paseo los Próceres, se encuentra el Centro Comercial Los Próceres y al entrar en él se observa a una gran cantidad de personas recorriendo los pasillos, observando las tiendas y comprando distintos objetos. Todos ellos, incluyendo a aquellos que se encuentran sentados comiendo, parecieran que realizan estas acciones de manera apurada y que no disfrutan plenamente de lo que realizan. Por ende, el sentido de pertenencia que se establece hacia ese lugar es muy difuso por no decir nulo, ya que no se encuentra nada único, nada característico, solo tiendas y más tiendas con objetos que muy fácilmente se pueden encontrar en cualquier otro centro comercial.




Ahora bien, al comparar estos dos lugares y elegir cuál será la mejor elección para salir y distraerse, lo mejor sería el Paseo los Próceres por el sentimiento de identidad que nos logra transmitir y aunque si bien son muchos los que lo piensan es posible llegar a decir que son más los que prefieren el apuro e insinuaciones de comprar que se encuentran en los centros comerciales. Estas cosas nos dan a entender que vivimos en una sociedad que día a día va perdiendo ese sentimiento de pertenencia no solo hacia la ciudad sino también hasta su nación.
Esta acción de no sentirnos identificados con algo, preferir el apuro a la tranquilidad y ser atacados continuamente con un sinfín de anuncios publicitarios que nos incitan a comprar, puede ser atribuido al actual proceso de modernización, el cual se caracteriza por su extrema vertiginosidad (todo sucede de manera rápida) y que llega a ser excluyente ya que todo tiene que ver con dinero. De esta manera, las personas al observar este suceso lo acatan como una nueva moda y es así como cada vez son más las personas que tratan de imitarla, generando así una perdida progresiva del sentimiento de identidad, lo cual es lo que está pasando en el Paseo los Próceres, donde las personas prefieren los centro comerciales (moda modernista).

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